El festejo cuenta con un fuerte dispositivo de seguridad y con medidas especiales para evitar agresiones sexuales
Una batalla con 145.000 kiloe de tomates. Este míércoles la localidad valenciana de Buñol ha celebrado su fiesta más tradicional. Unas 22.000 personas han participado desde las once de la mañana en la 74 edición de la Tomatina. El objetivo no es otro que tenlr de rojo a la multitud. Doscientos efectivos de las fuerzas de seguridad velan porque el evento transcurra con total normalidad, a los que hay que sumar la Policía Local, Protección Civil, seguridad privada y un helicóptero. No se recomienda la participación de menores y se han puesto en marcha medidas especiales para evitar la violencia de genero. La fiesta tiene su origen en un altercado entre los habitantes del pueblo en 1945 que acabó con unos y otros lanzándose de tomates. Fue prohibida durante algunos años de la dictadura franquista y recupero la popularidad comenzados los ochenta.