Mientras el presidente ruso se congratulaba de cumplir con este proyecto gigantesco, la Unión Europea y Ucrania han rechazado esta nueva ruta ferroviaria por ser una nueva violación de la soberanía de Ucrania.
Putin otea en el horizonte un nubarrón que llega del oeste. La inauguración del gran puente que une Rusia con Crimea ha abierto una nueva brecha con la Unión Europea y con Ucrania. Mientras el presidente ruso se congratulaba de cumplir con este proyecto gigantesco la Unión Europea advertía a través de twitter al mandatario de que esta nueva ruta ferroviaria es una nueva violación de la soberanía de Ucrania.
La oficina del presidente ucraniano en Crimea también ha comunicado que se trata de "una grave violación de la soberanía estatal y la integridad territorial de Ucrania por parte de Rusia... Además de un desprecio del Kremlin a los principios y normas del derecho internacional universalmente reconocidos".
La administración de Volodymir Zelensky recuerda a Rusia que "toda entrada o salida de la zona temporalmente ocupada de Crimea debe realizarse únicamente previo acuerdo con la parte ucraniana y hace hincapié en que ninguna medida de la Federación de Rusia en relación con Crimea cambiará el estatuto de la República Autónoma de Crimea".
