Tras los casos de Roma, a los catorce primeros contagiados en la región de Lombardía, se sumaron poco después los dos primeros ciudadanos con síntomas de haber contraído la enfermedad, en el Véneto, región donde ha fallecido el primer italiano
Alarma en Italia ante la propagación del COVID-19. El contagio del 'coronavirus' se ha extendido a varias regiones del país. Tras los casos de Roma, a los catorce primeros contagiados en la región de Lombardía, se sumaron poco después los dos primeros ciudadanos con síntomas de haber contraído la enfermedad, en el Véneto.
En esta región del norte del país ha fallecido la primera v´íctima italiana del nuevo coronavirus, un hombre de 78 años que murió en un hospital de Padua.
"Nuestro principal objetivo para las próximas horas es poner límites al área de contagio. Tenemos que trabajar para contener el 'coronavirus' en un área geográfica limitada. En Italia estamos preparados para ello. En los últimos días habíamos establecido un plan. Lo habíamos preparado porque parecía evidente que lo que realmente ha ocurrido ahora, estaba a punto de suceder. Ahora se trata de llevar a cabo el plan que teníamos preparado", afirma Roberto Speranza, ministro de Salud de Italia.
Ante la propagación del virus, las autoridades han tomado medidas extremas y han recomendado a los ciudadanos que permanezcan en sus domicilios y eviten el contacto con otras personas.
"Hemos considerado que era necesario invitar a la población de las zonas de Codogno, Castiglione d'Adda y Casal Pusterlengo a quedarse en sus respectivas casas. Solamente se trata de una medida de precaución de carácter excepcional", declara Giulio Gallera, concejal de Bienestar de la región de Lombardía.
Las autoridades han ordenado el cierre de todos los lugares públicos en varias localidades italianas en un intento de detener la propagación del virus. La medida afecta a alrededor de 35 000 personas.