Focos y banderas en los jardines de la Casa Blanca para una puesta en escena a la altura de las circunstancias. Acompañado de su esposa y ante mil invitados, Donald Trump ha aceptado la nominación republicana para un segundo mandato como Presidente de Estados Unidos, un país herido y dividido...
PUBLICIDADFocos y banderas en los jardines de la Casa Blanca para una puesta en escena a la altura de las circunstancias. Acompañado de su esposa y ante mil invitados, Donald Trump ha aceptado la nominación republicana para un segundo mandato como Presidente de Estados Unidos, un país herido y dividido en el que no hay medias tintas en las opiniones sobre el mandatario.
"Mis queridos compatriotas: hoy, con el corazón lleno de gratitud y optimismo sin límites, acepto profundamente esta nominación a la Presidencia de Estados Unidos", afirmaba Trump antes de tender la mano a simpatizantes de otras opciones políticas. "El Partido Republicano, el partido de Abraham Lincoln, avanza unido, decidido y preparado para acoger a millones de demócratas, independientes y a cualquiera que crea en la grandeza de Estados Unidos, y en el corazón justo del pueblo estadounidense".
Extramuros, cientos de personas mostraron su oposición a la nominación de Trump, a quien los sondeos sitúan varios puntos por detrás de su rival demócrata, Joe Biden, de cara a los comicios del 3 de noviembre. También fue muy criticado el hecho de haber elegido un escenario, la Casa Blanca, que tradicionalmente se ha reservado a la acción gubernamental y no a actos de campaña.