El embajador de Birmania en el Reino Unido es la última víctima del Ejército birmano. El agregado militar de la legación diplomática ha expulsado del edificio a Kyaw Zwar Minn tras comunicarle que ya no representa a Birmania. El "pecado" del embajador fue pedir la liberación de la Premio Nobel...
El embajador de Birmania en el Reino Unido es la última víctima del Ejército birmano. El agregado militar de la legación diplomática ha expulsado del edificio a Kyaw Zwar Minn tras comunicarle que ya no representa a Birmania. El "pecado" del embajador, que finalmente pasó la noche dentro de su automóvil, fue pedir la liberación de la Premio Nobel de la Paz y líder de facto del Gobierno depuesto, Aung San Suu Kyi.
Mientras tanto, en Birmania continúan las protestas contra el golpe militar del pasado 1 de febrero. En Rangún, varios manifestantes quemaron una bandera china para denunciar el supuesto apoyo del gigante asiático al Ejército. Se quejan de que Pekín respalda política y económicamente a la Junta birmana y utiliza su derecho de veto para impedir junto a Rusia que el Consejo de Seguridad de la ONU tome medidas contra los responsables de la represión, que ya ha dejado más de 500 muertos, entre ellos decenas de niños. También continúan las detenciones de activistas, manifestantes y figuras públicas que han mostrado su rechazo al golpe.
El denominado gobierno civil birmano ha recopilado 180.000 pruebas de abusos de la junta militar. En su informe no se incluyen las, al menos, 15 muertes de manifestantes registradas el miércoles.
