Apoyó el matrimonio entre personas del mismo sexo, que en Chile solo pueden vincularse desde 2015 bajo la figura legal de "unión civil": "Debemos profundizar sobre el valor de la libertad, incluyendo la libertad de amar y formar familia con el ser amado".
PUBLICIDADEl presidente de Chile, el conservador Sebastián Piñera, acorralado primero por las graves protestas que reprimió con el ejército y después por la devastadora pandemia, presentó este martes su rendición de cuentas ante el Congreso.
Respaldó el matrimonio entre personas del mismo sexo, que en Chile solo pueden vincularse desde 2015 bajo la figura legal de "unión civil": "Debemos profundizar sobre el valor de la libertad, incluyendo la libertad de amar y formar familia con el ser amado (...) Pienso que ha llegado el tiempo del matrimonio igualitario en nuestro país".
Un reconocimiento al matrimonio igualitario que ha indignado a los partidos de derecha que forman la coalición de Gobierno, que preside, especialmente en las filas de las ultraconservadoras Unión Demócrata Independiente y Renovación Nacional.
Si se aprueba el proyecto de ley que lleva discutiéndose desde 2017 en el Parlamento, Chile se convertiría en el octavo país latinoamericano en legalizar el matrimonio gay, tras Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México y Uruguay.
Piñera hizo autocrítica, sobre todo en la gestión de la pandemia, que ya deja casi un millón cuatrocientos mil infectados y más de veintinueve mil muertos 29.300 muertos.
Pese a que Chile es el segundo pais del mundo tras Israel con mayor porcentaje de población vacunada, ni las infecciones, ni los ingresados graves, disminuyen, lo que lleva a los expertos a señalar desde fallos en la propia vacuna china Coronavac a un temprano levantamiento de las restricciones.
Chile registró este martes una positividad del 10 % en pruebas PCR. Hay 3.200 pacientes en unidades de cuidados intensivos, solo quedan 147 camas UCI disponibles casiu como en abril del año pasado.
El país andino sufre un repunte de contagios que evidencia que el país no logró dejar atrás una segunda ola de la covid-19 que comenzó en marzo, tras las vacaciones de verano, y que llevó a las autoridades a decretar cuarentena para más del 90 % de la población.
Chile mantiene las fronteras blindadas hasta el próximo 15 de junio, toque de queda de 22 a 5 y el estado de excepción por catástrofe desde hace más de un año.