Los ciberinvestigadores apuntan que los piratas reclaman a las pequeñas empresas 50.000 dólares y cinco millones a las grandes compañías
Cientos de negocios cerrados en diferentes partes del mundo por un ataque informático. En unos 500 supermercados Coop en Suecia, por ejemplo, las cajas registradoras y de autoservicio han dejado de funcionar. El presunto ciberataque se habría perpetrado contra el software Kaseya. Este tipo de acciones, conocidas como ransomware, pueden describirse como el chantaje de los últimos tiempos. Los piratas informáticos reclamarían entre 50 000 y 5 millones de dólares según el volumen de la empresa. Coop no utiliza Kesaya directamente en sus sistemas, sino que lo hace uno de sus proveedores de software.
Emma Knapp, es la portavoz de Coop y señala: "Esta es una situación extraordinaria que no debería ocurrir. Tenemos que analizar a fondo cómo manejar esto en el futuro".
Los ciberinvestigadores afirman que unas 200 empresas ya se han visto afectadas por este "colosal" ataque de ransomware, que principalmente se ha dado en Estados Unidos. La empresa informática Kaseya con sede en Florida, cree que la banda de ransomware REvil, vinculada a Rusia, ha sido la responsable. El FBI acusó a esta banda de un hackeo en mayo que paralizó las operaciones de JBS, el mayor proveedor de carne del mundo.