Según la presidenta de la Comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo, Gwendoline Delbos-Corfield el Estado de derecho en Hungría se ha degradado en varios aspectos con el gobierno de derecha de Victor Orbán.
Una delegación parlamentaria pasó tres días en Hungría con representantes de los siete grupos políticos del Parlamento Europeo.
Según la presidenta de la delegación de la Comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo, Gwendoline Delbos-Corfield, el Estado de derecho en Hungría se ha degradado en varios aspectos con el gobierno de derecha de Victor Orbán.
Delbos-Corfield expresó su preocupación no solo por la reforma del sistema judicial húngaro, la externalización de bienes públicos a fundaciones o la trazabilidad de los fondos de la Unión Europea, sino también por las leyes aprobadas en condiciones de emergencia y el espionaje a la oposición con el programa informático israelí Pegasus.
También mantuvieron conversaciones con gobierno, oposición, periodistas y OBG.
Delbos-Corfield, del Grupo de Los Verdes -Alianza Libre Europea hizo balance de la visita:"Debe constar que el Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional resultaron difíciles. Una persona se negó a hablar con nosotros, alguien del mundo de los medios de comunicación, vino y dijo que éramos una broma, un teatro, y se fue. Pero aparte de eso, tuvimos conversaciones muy interesantes. En el Supremo y el Constitucional tuvimos algunas negativas a contestar preguntas, pero también hubo una clara hostilidad. Y en un caso, en el del Tribunal Supremo, nos amenazaron dos veces de desacato a la justicia".
Ya en 2018, el Parlamento Europeo pidió a los Estados miembros que investigaran si Hungría viola los valores fundamentales de la Unión Europea. Basándose en los resultados de la visita, la delegación presentará un informe al Parlamento Europeo en diciembre.