Georgieva: "Reinstalar reglas fiscales en 2023 sería contraproducente para la recuperación"

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Con la intensificación de las presiones inflacionarias, el aumento de nuevo de las infecciones por COVID-19 y la nueva variante ómicron, que genera nuevas incertidumbres, ¿están en riesgo la recuperación económica europea y mundial? Para debatir este tema, me acompaña aquí, en Bruselas, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.

Efi Koutsokosta, Euronews: Bienvenida de nuevo a Europa, directora gerente. Y permítame ir directa al grano. Esta última ola y la nueva variante ómicron ¿podrían poner en riesgo la recuperación económica de Europa?

Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional:

"Lo que estamos viendo es que la recuperación en la zona euro es fuerte. Para este año proyectamos un crecimiento del 5%, para el próximo año de un 4,3%. Eso, después de que el año pasado se redujera en un 6,5%. Esta recuperación es muy impresionante. Se basa en tres pilares: vacunas, apoyo a las políticas y apoyo a empresas y personas que aprenden a funcionar con la pandemia que aún nos rodea. Lo que vimos en el tercer trimestre fue un aumento muy significativo. Pero como indica su pregunta, en el cuarto trimestre las perspectivas de crecimiento son más débiles, se ven debilitadas por el aumento de las infecciones. En ese sentido, la incertidumbre de la nueva variante no ayuda".

Efi Koutsokosta, Euronews: ¿Cómo de profunda podría ser la herida?

Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional:

"No esperamos ninguna rebaja significativa para la eurozona. Creemos que el elemento más importante es el hecho de que las empresas y los consumidores están operando, relativamente hablando, de manera sólida, a pesar de que hay un aumento de infecciones y eso está respaldado también por medidas políticas continuas".

Efi Koutsokosta, Euronews: Hay otro factor que también hemos visto en su pronóstico y es la inflación. ¿El aumento de la inflación es una amenaza real para el progreso económico y el nivel de vida?

Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional:

"En la zona euro, la inflación es transitoria. Está impulsada por el precio de la energía, las interrupciones del suministro y también por el hecho de que estamos viendo un aumento de la demanda después de los años de cierres. Lo que esperamos, va a retroceder en 2022. Así, para finales del próximo año, la inflación sería relativamente débil, por debajo del objetivo del 2% del BCE. Y esta es la razón por la que nuestro mensaje es: no se apresuren en endurecer la política monetaria porque puede enfriar las perspectivas de crecimiento, no por una buena razón. En otras palabras, las expectativas de inflación en la eurozona están bien ancladas. Ahora bien, dicho esto, si hay un empujón en los salarios, si hay un problema en el mercado inmobiliario o si China... S__i estos problemas se vuelven más pronunciados, por supuesto, las condiciones pueden cambiar. Y es por eso que el BCE tiene que estar muy atento, reconocer que los riesgos están al alza".

Efi Koutsokosta, Euronews: Pero dado que la pandemia está lejos de terminar, hay dudas aquí en Europa sobre la deuda acumulada por los Gobiernos para apoyar sus economías y sistemas de salud. Se espera que la UE trate el tema el próximo año. ¿Qué debe hacerse?

Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional:

"Permítanme decir primero que exactamente, por esta razón, el BCE debe tener mucho cuidado de no endurecer las condiciones financieras de manera prematura y sin una razón sólida, porque los altos niveles de deudas en la actualidad están acompañados de un nivel más bajo que antes de la pandemia del coste de la deuda. Reglas fiscales. Si vamos a reinstalar reglas fiscales en 2023, sería contraproducente para la recuperación de la eurozona y, de hecho, es indeseable. Así que nuestra recomendación es: por favor, no lo hagan. Piensen en cambiar las reglas, para que sean más simples, se puedan implementar y que se apoyen más en la propiedad nacional: en los países que vigilan su posición fiscal".

Efi Koutsokosta, Euronews: El Fondo Monetario Internacional fue partidario de las medidas de austeridad hace una década después de la crisis financiera. ¿Haría la misma evaluación ahora que la deuda de Europa se está acumulando?

Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional:

"La deuda de Europa ha aumentado por una buena razón: para poner un colchón cuando la economía se paralizaba, para que los hogares y las empresas siguieran funcionando. Tenemos paro a niveles anteriores a la pandemia, no tenemos quiebras por todas partes. Ese es un resultado muy sólido de las decisiones políticas tomadas. Y, por supuesto, queremos ver una recuperación sólida, amortiguadores de reconstrucción a mediano plazo que aborden eso, pero no con la fuerza sofocante de la austeridad".

Efi Koutsokosta, Euronews: Pero vemos que tanto la recuperación como los niveles de deuda no están distribuidos de manera uniforme en Europa. Países como Italia, Grecia y España tienen problemas mucho mayores. Entonces, ¿qué se debe hacer? ¿Se está reviviendo la antigua división entre el sur y el norte?

Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional:

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"Bueno, una de las cosas bonitas de Europa es que Europa, en un momento de crisis, se une y el acto de solidaridad que muestra el Plan de Recuperación de la UE, es extraordinario. Lo que hace es dirigir más ayuda a los países que más la necesitan y, por primera vez, pone la capacidad de endeudamiento europeo al servicio de los ciudadanos europeos. Esperamos ver ese tipo de solidaridad, camaradería continua gracias a la agenda verde".

Efi Koutsokosta, Euronews: Para terminar, reducir la deuda, impulsar la inversión verde y digital mientras se recuperan las reglas. ¿Cómo podría hacerse y qué debería priorizar Europa?

Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo Monetario Internacional:

"En primer lugar, Europa debe priorizar la recuperación de la pandemia y apoyar las reformas estructurales y la transformación estructural, que es llevarla a un futuro verde y digital. No es una tarea fácil porque requiere inversiones, públicas y privadas, y requiere volver a capacitar y mejorar a la mano de obra europea. Si nos proyectamos en lo que queremos que sea Europa dentro de 10, 15 o 20 años: queremos que sea innovadora, vibrante, altamente capacitada, ágil, capaz de hacer avanzar al mundo".