Se alabó el sacrificio del italiano durante la pandemia que optó por confinarse en Bruselas, lejos de su familia, y mantener abierta la Eurocámara; abriendo, incluso, los edificios de la institución a los más débiles como las mujeres maltratadas y donó menús a personas sin hogar
El hemiciclo y la grada de invitados del Parlamento Europeo en Estrasburgo estaban llenos hasta prácticamente la última silla para dar el último adiós a su presidente David Sassoli, fallecido repentinamente el pasado martes a los 65 años.
Los líderes de las instituciones comunitarias y el presidente francés, así como los primeros ministros de Italia, Luxemburgo, Grecia, Croacia y Malta y los presidentes de varios parlamentos nacionales europeos, incluyendo a la española Meritxell Batet, arroparon a la viuda y a los dos hijos de Sassoli en esta ceremonia.
La amabilidad es una fuerza y nunca una debilidad
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, compartió sus recuerdos.
"De nuestra cooperación, de los momentos que pasamos juntos, guardo, querido David, preciosos recuerdos. Momentos que demuestran que la amabilidad es una fuerza y nunca una debilidad. Momentos que demuestran que tuviste una preocupación constante por unir a la gente, por volcarnos juntos hacia el futuro, por inspirar también nuevas ideas para Europa"
Se alabó el sacrificio del italiano durante la pandemia que optó por confinarse en Bruselas, lejos de su familia, y mantener abierta la Eurocámara; abriendo, incluso, los edificios de la institución a los más vulnerables como las mujeres maltratadas, y donó menús a personas sin hogar y al personal sanitario.
“Es mejor enfadarse y discutir en paz"
La elegía ante el hemiciclo corrió a cargo del ex primer ministro italiano Enrico Letta, que evocó a su gran amigo como una persona que “tenía ese gran don de mirar más allá, sabía que no debía detenerse en las apariencias” y dedicó su vida a “dar la palabra a los que no tienen voz”.
“Europa es unión en la diversidad, palabras que para David no eran un eslogan retórico. La diversidad es la gran riqueza de nuestro continente. Y esto requiere un trabajo duro y paciente”, continuó Letta, que recordó que el propio Sassoli estaba convencido de que, aunque un trabajo así puede crear enfados, “es mejor enfadarse y discutir en paz".
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que no pudo estar presente en la ceremonia por el positivo en covid de su chófer, compartió en redes sociales el discurso que hubiera pronunciado ante el hemiciclo, en el que destacó la pasión del italiano por causas como la defensa del Estado de derecho, la solidaridad y dignidad como valores principales de la política migratoria europea y los derechos del colectivo LGTBIQ+.
"Corazón y ambición"
Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, recordó las palabras que el propio Sassoli había pronunciado en su discurso de investidura en el verano de 2019, “corazón y ambición”.
"La Europa que él defendió está unida - (con una) solidaridad entre sus ciudadanos y entre sus miembros. La Europa que él defendió es fuerte - con la fuerza de la unidad. A la vez ordenador y pacificador de este hemiciclo, enfrentó ideas, nunca personas", resaltó el Jefe del Estado francés.
Tras el homenaje de Emmanuel Macron, cuyo país ostenta este semestre la presidencia rotatoria de la Unión Europea, sonó el himno europeo, el Himno de la Alegría de Ludwig van Beethoven para un político al que todos recuerdan con una eterna sonrisa.