Una veintena de integrantes de una compañía de teatro se refugia de las bombas en un sótano de Kiev. Sobreviven mentalmente a la invasión rusa de Ucrania gracias a las habilidades artísticas de sus miembros.
PUBLICIDADEn esta compañía de teatro nunca pensaron que paquetes de libros iban a servir para proteger las ventanas de su refugio en Kiev. "Los libros salvan la vida", destaca el director de teatro Alex Vorovensky.
Ahora gracias al arte, unos y otros se apoyan para afrontar el infierno de los bombardeos que han quedado grabados en la memoria
"¿Cómo soportamos nuestro modo de vida? porque el arte es mi vida y si tenemos arte la vida continúa", añade Vorovensky.
La actriz Anabel Soto, por ejemplo, ensaya su última obra. Tanto ella como la veintena de compañeros con los que se refugia no saben cuánto tiempo tendrán que quedarse en las profundidades de Kiev.
"Complicado, creo que los primeros días no sabíamos lo que estaba pasando. Esperábamos que esto durara, no sé, cuatro días... Un poco", señala Soto.
Otros como Jenya, este pianista, siguen enseñando a sus alumnos de forma virtual ya que muchos de ellos han huido del país.
Mientras tanto el como sus compañeros tratan de encontrar momentos como este para resguardarse del dolor que impregna la superficie.