Ni siquiera un drástico recorte de las emisiones de CO2 podría salvar los glaciares de Austria, según la ONU.
PUBLICIDADEn Austria, los glaciólogos podrían quedarse pronto sin trabajo... debido al derretimiento de las nieves eternas provocado por el calentamiento global. Para finales de siglo, todos los glaciares de la república alpina se habrán derretido, según pronósticos de la ONU. Las primaveras excepcionalmente cálidas como la de este año tienen en parte la culpa, explica Andreas Knittel, quien lleva más de tres décadas años midiendo el progresivo deshielo en estas montañas de Ankogel. Últimamente, la capa de nieve protectora del glaciar era sólo la mitad de lo habitual.
Décadas midiendo un dramático deshielo
"El último informe de la ONU confirma lo que llevamos midiendo desde hace dos décadas: que el ritmo de retroceso de los glaciares se está acelerando. A principios de abril, la capa de nieve en las lenguas de los glaciares ya se estaban derretido por el sol. Cualquier intento de contrarrestarlo no será suficiente", constata este científico.
Ni siquiera un drástico recorte de las emisiones de CO2 podría salvar los glaciares de Austria, según la ONU. Aún así, este equipo de glaciólogos sigue monitorizando el deshielo de estas montañas, donde hasta hace tres años se utilizaba la cinta métrica, ahora se emplean drones.
Drones para medir el derretimiento
"El dron sobrevuela el glaciar, tomando muchas fotos con un gran solapamiento. La información en 3D se procesa a partir de esas fotos, para reconstruir el terreno", explica Rosa Kück, técnica de geoinformación.
Pero no todos están convencidos del total retroceso de los glaciares en Austria. Si el calentamiento global se estabiliza en 1,5 grados centígrados, aún podrían perdurar algunos restos de hielo, según la glacióloga Andrea Fischer, de la Academia Austriaca de Ciencias (ÖAW).
"Es cierto, hasta cierto punto, que los glaciares habrán desaparecido en gran parte a finales de siglo, pero hay que tener en cuenta que, dependiendo del escenario, quedará algo de hielo".
Consecuencias en las centrales hidroeléctricas
Incluso si persisten zonas de hielo, es muy probable que el retroceso del glaciar tenga consecuencias de gran alcance, por ejemplo en la presa de agua Kölnbreinsperre.
"Cuando los glaciares desaparezcan, también faltará el agua del deshielo en ríos y embalses. Las centrales hidroeléctricas como ésta dependerán de las imprevisibles lluvias, por lo que se está investigando cómo afectará a la producción de electricidad en los Alpes.
Desde Austria, Johannes Pleschberger, para Euronews