El 47 por ciento de la Unión Europea está en situación de alerta. Como ejemplo: fronterizo entre Suiza y Francia, el Lac des Brenets, para los suizos, Lac de Chaillexon, para los franceses, muestra la gravedad de la sequía en Europa.
El 47 por ciento de la Unión Europea está en situación de alerta.
Como ejemplo dramático: fronterizo entre Suiza y Francia, el Lac des Brenets, para los suizos, Lac de Chaillexon para los franceses, muestra la gravedad de la sequía en Europa.
Está desde hace de 12.000 años, en el macizo subalpino del Jura; tenía unos 18 metros de profundidad, pero este verano ha desaparecido casi por completo.
En Bruselas la Comisión Europea analiza con preocupación las múltiples consecuencias de este verano caluroso y sofocante a través de su portavoz Johannes Bahrke: "El último boletín de seguimiento de los cultivos pone de manifiesto que las condiciones meteorológicas excepcionalmente calurosas y secas en amplias zonas de Europa siguen reduciendo sustancialmente las perspectivas de rendimiento de los cultivos de verano. Según los científicos de la Comisión, el tiempo seguirá siendo más caliente y seco de lo habitual en la región del Mediterráneo occidental hasta noviembre. Y ya lo hemos dicho, la actual sequía parece ser la peor desde hace al menos 500 años".
Pero la sequía no sólo arruina los cultivos. Numerosas ciudades y pueblos europeos, como Le Bouchet-Saint-Nicoles, en el sureste de Francia, tienen problemas para abastecerse de agua y dependen del reparto diario de camiones cisterna.
Fabien Rochedy, propietario de un hotel en la zona recuerda: "Una mañana no tuvimos nada de agua. Para nuestros clientes del hotel y del bar utilizamos agua mineral embotellada. Así pudieron lavarse los dientes y pudimos hacer café".
El bajo nivel de los lagos y ríos está causando graves problemas medioambientales, con mortandad de peces en varios lugares, y también dificultando e incluso impidiendo el transporte fluvial.
Los bosques y campos europeos también sufren las consecuencias del intenso calor y la sequía con frecuentes y feroces incendios.
Según el Observatorio Europeo de la Sequía, el 47% del territorio sigue en situación de alerta por sequía y el 17% está en situación de alerta.