Los sindicatos convocantes piden mejores salarios ante la alta inflación y quieren presionar al presidente Emmanuel Macron en la reforma del sistema de jubilación. La semana que viene el metro de la capital iniciará un paro indefinido.
PUBLICIDADJueves negro en Francia, en palabras del ministro de Transporte Clément Beaune, ante la huelga nacional del sector público en demanda de aumento de salarios para hacer frente a la desorbitada inflación.
Ha causado enormes trastornos en París. Muchos habitantes de la capital han optado por ir al trabajo en bicicleta o andando, o han preferido teletrabajar desde casa.
Objetivo de cero metro y trenes de cercanías
"El objetivo de cero metro y cero trenes de cercanías parece haberse conseguido aquí en París donde numerosas estaciones están como esta, cerradas al público", comenta la corresponsal de Euronews Anelise Borges. "Gran parte de la circulación del transporte público solo estará asegurada en horas punta. Se trata de un movimiento que no ha hecho más que empezar, según numerosas organizaciones sindicales que afirman que estas movilizaciones se extenderán a las próximas semanas y meses. Sobre todo si las demandas de los trabajadores no son escuchadas.
Trabajadores que son esperados en las calles de París y de otras grandes ciudades del país este jueves en manifestaciones para pedir mejores salarios y mejores condiciones de trabajo y, sobre todo, para aumentar la presión sobre la administración de Emmanuel Macron respecto, entre otros temas, a la reforma del sistema de jubilación. Ya se anuncian muchas nuevas convocatorias de huelga, entre ellas una de carácter indefinido del metro de París a partir de la próxima semana".
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