Es el primer compromiso alcanzado por el Gobierno y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), en Caracas, en la nueva ronda de negociaciones de paz.
Las comunidades emberas de Colombia, desplazadas por la violencia, pueden volver a casa.
Es el primer compromiso alcanzado por el Gobierno y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), en Caracas, en la nueva ronda de negociaciones de paz. El presidente Gustavo Petro quiere que el acuerdo se amplíe a otras poblaciones, en todo el territorio colombiano.
Como recordó el presidente colombiano, el pueblo embera al igual que otras comunidades indígenas ha sido víctima de la violencia del conflicto a manos de diferentes actores que le han quitado "la tranquilidad de vivir en sus territorios".
Petro busca la "paz total"
Petro, el primer presidente de izquierdas en Colombia, apuesta por la "paz total".
El ELN es el último grupo armado de extrema izquierda activo, tras el acuerdo de paz firmado por las FARC en 2016. Actualmente cuenta con unos 5.000 integrantes. Desde su nacimiento, en 1964, esta guerrilla marxista-leninista ha dejado más de 17.000 muertos y decenas de miles de desplazados.