Familiares y amigos se reunieron este sábado en Nanterre, ciudad natal de Nahel, el joven muerto por un tiro de un policía a quemarropa.
Se celebró este sábado el funeral del joven de 17 años cuya muerte ha desatado disturbios en toda Francia y ha obligado al presidente, Emmanuel Macron, a posponer su visita de Estado a Alemania.
La familia de Nahel ha pedido que los periodistas y el público se mantuvieran alejados de la ceremonia.
Macron ha hablado este sábado por teléfono con el presidente alemán, Frank Walter Steinmeier, y le ha pedido el aplazamiento de su visita de Estado prevista a Alemania.
Es la segunda vez este año que los disturbios en Francia obligan a Macron a aplazar encuentros con un jefe de Estado, después de que Carlos III cancelara una visita debido a las protestas generadas por la ley que impone el retraso de la edad de jubilación.
Una comisaría en el barrio de Monplaisir, en la ciudad de Angers, quedó carbonizada.
La policía detuvo a más de mil trescientas personas en toda Francia durante la cuarta noche consecutiva de disturbios.
Resultaron heridos 79 policías , según recuento del ministerio de Interior, que también detalló que hubo 1350 vehículos incendiados y desperfectos en unos 234 edificios.
La indignación también se ha extendido a Bélgica.
En la noche del viernes, varios grupos de jóvenes se reunieron en el centro de Bruselas, así como en varios otros barrios de la capital belga y en la ciudad de Lieja.
En total ha habido un centenar de denidos.