El primer ministro sueco aceptó la invitación de Orbán para reunirse en Budapest y tratar de despejar el último obstáculo que impide la entrada de Suecia en la OTAN.
PUBLICIDADEl primer ministro sueco, Ulf Kristersson, acordó reunirse con su homólogo húngaro, Viktor Orbán, quien le había invitado a Budapest para hablar sobre la adhesión de Suecia a la OTAN, informaron este jueves medios locales.
Kristersson indicó que está de acuerdo en que un mayor diálogo entre los dos países sería beneficioso. Hungría es el único miembro de la OTAN que no ha dado luz verde aún al intento de Suecia de unirse a la alianza militar.
"Espero tratar todas estas cuestiones en profundidad con usted en Budapest en un momento conveniente para ambos", escribió Kristersson en una carta a Orbán, según la agencia de noticias sueca TT. El mandatario sueco también señaló que se encontrarán en Bruselas el 1 de febrerocon motivo de la reunión del Consejo Europeo.
La admisión en la OTAN requiere la unanimidad de todos los países miembros, pero más de un año de retrasos en Budapest y Ankara generaron frustración entre otros aliados que quieren ampliar la alianza de defensa en el contexto de la invasión rusa de Ucrania.
Turquía respalda la adhesión sueca, aunque Erdogan aún debe firmar la ratificación
El Parlamento turco respaldó la entrada de Suecia en la OTAN, eliminando un obstáculo importante para el ingreso del país previamente no alineado a la alianza militar. Los legisladores ratificaron el protocolo de adhesión de Suecia por 287 votos contra 55, y los miembros del partido gobernante explicaron que la postura más dura del país hacia los militantes kurdos resultó clave para obtener la aprobación.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que aún tiene que firmar la ratificación, también ha vinculado anteriormente su apoyo con el deseo de Turquía de comprar aviones de combate a Estados Unidos. Turquía estuvo retrasando la adhesión de Suecia durante más de un año y buscó concesiones del Gobierno sueco, al que acusó de ser demasiado indulgente con grupos que Ankara considera amenazas a la seguridad.
Suecia y Finlandia abandonaron sus posiciones tradicionales de no alineación militar para buscar protección bajo el paraguas de seguridad de la OTAN, tras la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022. Finlandia se unió a la alianza en abril, convirtiéndose en el miembro número 31 de la OTAN, después de que el Parlamento de Turquía también ratificara su candidatura.