Rusia ha intensificado los ataques contra las zonas controladas por Ucrania en la región suroriental de Donetsk.
En las últimas 48 horas, al menos dos personas murieron durante un bombardeo en una zona residencial de Selydove. El Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania afirmó que entre las víctimas mortales se incluyen un niño de 13 años, cuyo cuerpo fue encontrado bajo los escombros, y un hombre de 53 años.
En la misma región, las fuerzas rusas también atacaron la aldea de Oleksijevo-Druzhkivka. Siete personas resultaron heridas y más de cien casas sufrieron daños.
El pueblo está a unos 12 kilómetros de Kramatorsk, una de las ciudades clave de Donetsk que aún está en manos de Ucrania. Rusia habría llevado a cabo el ataque con bombas aéreas altamente explosivas.
Según informaciones preliminares, las mismas armas se habrían empleado en el distrito de Beryslavskyi, en Jersón, donde tres personas murieron y varias más resultaron heridas, incluidos voluntarios franceses.
Las autoridades locales dicen que Rusia está aterrorizando intencionadamente a la población, con el lanzamiento de ataques incluso sobre asentamientos que ya han resultado gravemente dañados. Fuentes oficiales agregaron que las instalaciones energéticassiguen siendo blanco de ataques.