La ocupación hotelera ha bajado un 25% antes de los Juegos Olímpicos que arrancan el próximo 26 de julio en la capital francesa.
PUBLICIDADSe suponía que iba a ser un verano récord, pero en París la industria hotelera está en un estado de confusión. A pocas semanas del comienzo de los Juegos Olímpicos, los turistas parecen estar dando la espalda a la capital francesa.
Para un hotel a los pies de Montmartre, el mes de junio no se parece en nada a los meses anteriores. El hotel está medio lleno, frente a la ocupación usual del 80% de los últimos años. "Incluso en las ofertas especiales, nadie acepta ninguna habitación", explica el director del hotel, Aldric Duval.
"Creo que el efecto de los Juegos Olímpicos es contraproducente, ya que todo es muy caro. Creo que les explicamos (a los turistas) que las restricciones de tráfico iban a ser complicadas, que el precio del billete de metro se iba a triplicar, que el impuesto turístico se había triplicado... Además, el clima es difícil, por lo que la gente tiene menos ganas de venir", dijo el director del Hotel Ze en París, Aldric Duval.
Los profesionales del turismo y la hostelería esperan recuperar el tiempo perdido con el efecto escaparate que los Juegos Olímpicos tendrán en sus reservas para las próximas temporadas.