El sábado continuaron las protestas para exigir al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y a su Gobierno que lleguen a un acuerdo que garantice la liberación de los rehenes tomados por Hamás.
Miles de personas salieron el sábado a las calles de Tel Aviv para exigir al Gobierno israelí que llegue a un acuerdo que garantice la liberación de los rehenes cautivos en Gaza. Durante la manifestación se pudo ver a manifestantes encendiendo bengalas y sosteniendo pancartas.
La guerra en Gaza comenzó cuando Hamás lanzó un ataque por sorpresa contra el sur de Israel en el que murieron unas 1.200 personas y 250 fueron tomadas como rehenes.
Unas 100 personas siguen cautivas, un tercio de las cuales se cree que han muerto. La mayoría fueron liberadas durante un alto el fuego el año pasado. Los acuerdos de alto el fuego tienen en cuenta el intercambio de rehenes de manera pacífica. Sin embargo, hasta la fecha ningún intento de acuerdo ha llegado a buen puerto.
En represalia por los ataques de Hamás, la ofensiva del Gobierno israelí ha matado a más de 41.000 palestinos en el territorio, según el Ministerio de Sanidad de Gaza. El Ministerio no distingue entre combatientes y civiles en su recuento, pero afirma que algo más de la mitad de los muertos eran mujeres y niños.
En una actualización del conflicto, las fuerzas israelíes y el grupo paramilitar libanés Hezbolá han intensificado los ataques a lo largo de la frontera entre Líbano e Israel, mientras sigue aumentando el temor a una guerra más amplia.