Un científico ruso, representante del famoso Museo del Hermitage, cayó en manos de la Policía en un hotel de Varsovia. Alexander B. era reclamado por los servicios ucranianos por realizar excavaciones arqueológicas ilegales en Crimea.
El portal 'RMF FM' fue el primero en dar a la información. Alexander B. llevaba tiempo realizando con su equipo excavaciones sin permiso en la Crimea ocupada. Más concretamente, el yacimiento en cuestión es la antigua ciudad de Mirmecio, en Kerch. Esto provocó la destrucción de parte del patrimonio cultural, según los investigadores ucranianos, con pérdidas estimadas en 200 millones de jrivnias, unos 4,5 millones de euros.
Alexander B., que es jefe del Departamento de Arqueología Clásica de la Región Septentrional del mar Negro en el Departamento del Mundo Clásico del Museo del Hermitage, se encontraba en Varsovia en tránsito, de camino desde los Países Bajos a los Balcanes. Durante el viaje iba a dar una serie de conferencias en Europa.
Según los medios de comunicación, agentes de la ABW (la Agencia de Seguridad Interna de Polonia) detuvieron al sospechoso vestido de paisano cuando llegaron a uno de los hoteles de Varsovia. Aleksandr B. fue detenido de forma totalmente inesperada.
El científico estaba siendo perseguido por los servicios ucranianos desde noviembre de este año, y había sido continuamente uno de los jefes de los equipos arqueológicos en la Crimea ocupada desde 2014.
Según 'Current Time TV', la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zakharova, dijo que fue detenido en base a una orden de arresto internacional emitida por Ucrania. Representantes de la embajada rusa en Varsovia se reunieron con el científico, que apeló la decisión del tribunal de arrestarlo temporalmente, dijo**. También afirmó que Crimea es "parte integrante de la Federación Rusa"** y que "este tipo de acciones politizadas no pueden tener futuro y no quedarán sin consecuencias".
Kiev exige su extradición, y la Fiscalía General de Ucrania ha declarado que sus acciones "destruyen de hecho un lugar legalmente protegido de importancia estatal". En agosto de 2022, su equipo desenterró 30 monedas de oro en el asentamiento de Mirmecio, 26 de las cuales llevaban el nombre de Alejandro Magno.