Por Euronews
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El plan de la última oportunidad de SAS fue bien acogido por los inversores este lunes en Estocolmo. La primera gran compañía aérea escandinava, propiedad en un cincuenta por ciento de los Estados danés, sueco y noruego, vio como sus acciones ganaban hasta el ocho por ciento para acabar cerrando con un alza del dos.
La aerolínea cuenta economizar tres mil millones de coronas suecas, o sea 350 millones de euros, suprimiendo 800 puestos y bajando los salarios. Asimismo, espera obtener una cantidad equivalente con la cesión de activos. Cuando se complete el plan, sus efectivos habrán pasado de 15.000 a 9.000 personas.
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