La controvertida reforma impulsada por el primer ministro Gabriel Attal ha quedado congelada tras el resultado electoral del domingo.
PUBLICIDADEl primer ministro francés, Gabriel Attal, ha decidido suspender el proyecto de reforma del sistema de subsidio de desempleo tras la primera vuelta de las elecciones legislativas.
El domingo, el partido de derechas Agrupación Nacional (AN) y sus aliados obtuvieron el 33% de los votos, seguidos de la alianza de izquierdas Nuevo Frente Popular, con el 28%. La coalición Ensemble del presidente Macron quedó tercera, con algo menos del 21% de los votos.
Ante las críticas de los dos principales partidos a la reforma del desempleo de Attal, el primer ministro ha redoblado uno de sus principales objetivos desde que asumió el cargo en enero. La formalización del decreto no tuvo lugar el lunes, como estaba previsto, a pesar de las afirmaciones contrarias hechas por Attal el mes pasado.
"Antes del 1 de julio se publicará un decreto para esta reforma, que se basa en el marco establecido por la reforma de 2019", declaró el primer ministro a la radio 'France Inter' el 13 de junio.
Attal hablaba pocos días después de las elecciones europeas, en las que el partido Renacimiento de Macron fue duramente derrotado por AN, lo que provocó las elecciones anticipadas francesas.
"[La reforma] va acompañada sobre todo de un mejor apoyo a los desempleados para ayudarles a volver al trabajo", añadió Attal.
Cambios en el sistema de prestaciones
La reforma propuesta por el Gobierno propone limitar las prestaciones de desempleo a un máximo de 15 meses para los menores de 57 años, frente al tope actual de 18 meses.
Attal también prevé reducir los criterios de elegibilidad, lo que significa que alguien debe haber trabajado al menos ocho meses durante los últimos 20 meses para recibir los pagos del Estado.
Actualmente, los solicitantes deben haber trabajado al menos seis meses en los últimos 24 meses. El izquierdista Nuevo Frente Popular ha tachado la reforma de "cruel" y ha anunciado que la recurrirá inmediatamente.
Jordan Bardella, del AN, en declaraciones a France 3, también mostró su desaprobación por la medida: "Estoy un poco harto de que se pidan esfuerzos sistemáticamente a los mismos".
También en la derecha, los candidatos del partido Los Republicanos están divididos sobre la cuestión. Los poderosos sindicatos se oponen con vehemencia a la reforma.
Impulsar el crecimiento combatiendo el desempleo
Varios expertos económicos, sin embargo, subrayan la necesidad de aumentar las cifras de empleo en Francia para impulsar el crecimiento, una de las políticas distintivas del mandato del presidente Macron. Desde que llegó al poder en 2017, Macron ha introducido una serie de cambios en el sistema de desempleo del país que han impulsado las cifras de trabajadores.
Aun así, las finanzas francesas no son tan halagüeñas en la actualidad, sobre todo porque las arcas públicas están limitadas por un déficit presupuestario cada vez mayor. En 2023, el déficit se elevó al 5,5%, superando el objetivo del Estado del 4,9%.
"Si Francia quiere el pleno empleo, si quiere reindustrializarse, si quiere seguir siendo una potencia económica de primer orden, debe avanzar hacia el pleno empleo y, por tanto, debe continuar con la reforma de las prestaciones por desempleo", declaró el lunes el ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, a 'France Inter'.
Pausar la reforma podría ser un medio para que el Gobierno evite avivar conflictos prematuros con sus adversarios políticos, a pesar de los riesgos económicos.