¿Tiene una hora libre? Si es así, quizá le interese escuchar al hombre con el nombre más largo del mundo leyéndolo en voz alta.
Presentarse a otra persona suele ser un asunto rápido, que se resuelve en unos segundos. Sin embargo, si conoces a Laurence Watkins, será mejor que te prepares. Hace poco leyó su nombre completo... y tardó más de una hora en hacerlo.
Nacido como Laurence Gregory Watkins, este neozelandés de 60 años -ahora ciudadano australiano residente en Sídney- se cambió legalmente el nombre en marzo de 1990 para incluir 2.251 segundos nombres. Esto le valió el récord Guinness al nombre personal más largo, con 2.253 palabras únicas.
"Siempre me han fascinado los récords inusuales y extravagantes que algunas personas consiguen, y quería formar parte de esa escena", declaró a Guinness World Records. "Leí el libro Guinness World Records de cabo a rabo para ver si había algún récord que pudiera batir y el único que tenía posibilidades de batir era añadir más nombres que el actual poseedor".
No es que el récord fuera una hazaña fácil, sobre todo porque su solicitud fue aceptada por el Tribunal de Distrito de Auckland pero rechazada por el Registro General. Laurence tuvo que llevar su caso ante el Tribunal Superior de Nueva Zelanda, que determinó que debía permitírsele cambiar su nombre a su antojo. Sin embargo, no mucho después de su decisión, cambiaron dos leyes que impedirían a otros hacer algo similar en el futuro.
Al leer en voz alta su nombre completo, empezó por: Laurence Alon Aloys Aloysius Alphege Alun Alured Alwyn Alysander Ambie Ambrose Ambrosius Amias Amiot Amyas Anders Andre Andrea Andreas Andrew Andy Aneirin Anguish Anleifr...
Te ahorraremos el resto. Si quieres saber su nombre completo, ponte cómodo y haz clic en el vídeo de abajo.
"Mi nombre favorito es AZ2000, que significa que tengo nombres de la A a la Z y tengo 2000 nombres", dijo Watkins. Somos fans del tramo "Myron Naaman Nahum Napoleon Narcissus Nehemiah Nennog Neot Nestor", y el "Wulfric Wulfstan Wyatt Wybert Wyndham Wynford Wystan Xenophon" tampoco se queda atrás. Sólo queda una pregunta: ¿Cómo de grueso es el pasaporte de este hombre?