Un ejemplo de este proceso es la posible vacuna contra el coronavirus. Para ello, cogen el virus de la gripe y le ponen proteínas de la COVID-19 en la parte exterior. Eso hace que el sistema inmune reaccione contra el coronavirus.
En el Centro de Regulación Genómica de Barcelona llevan años investigando cómo desarrollar vacunas sintéticas para frenar los virus. Este grupo de científicos podría haber dado con una de las herramientas clave para frenar la pandemia que asola al mundo entero.
Según explica a Euronews Luis Serrano, director del Centro de Regulación Genómica de Barcelona, conseguir vacunas contra un virus es un proceso complejo. "Esto es porque cuesta que el organismo, que luego se inyecta atenuado en las personas o en los animales para tener una respuesta inmune, crezca".
Aún así, los investigadores han encontrado una solución a este problema. "Si tenemos un organismo que conseguimos que crezca muy bien y ponemos en la parte exterior de ese organismo proteínas de otros virus contra las que queremos la vacuna, podemos hacer que el organismo crezca yobtener vacunas contra otros organismos que son difíciles de reproducir", añade el director.
Un ejemplo de este proceso es la posible vacuna contra el coronavirus. Para ello, cogen el virus de la gripe -que se utiliza para vacuna normalmente- y le ponen proteínas de la COVID-19 en la parte exterior. Eso hace que el sistema inmune reaccione contra el coronavirus.
"En este caso la idea era la misma, los animales tienen una serie de infecciones por unas bacterias que son muy difíciles de reproducir, que causan miles de millones de pérdidas anuales. Así que utilizamos otra bacteria que teníamos en el laboratorio, que crecía muy bien, y pusimos las proteínas de esas otras bacterias en la zona exterior para luego pinchar a los animales y que estuviesen vacunados".