En 2016, el Partido Popular había ganado en 42 de las provincias, mientras que estas elecciones solo en cuatro.
PUBLICIDADLos resultados de la jornada electoral han teñido al mapa de España de rojo. Con más del 99% de los votos escrutados, las cifras se hacen definitivas.
El Partido Socialista (PSOE) ha logrado 123 escaños del Congreso de Diputados, 37 más que en el Parlamento actual y sacando una diferencia de más de 50 parlamentarios al segundo.
El Partido Popular (PP) ha perdido 71 escaños, pasando de 137 a 66 estos comicios, afectado sin duda alguna por la fragmentación de la derecha. Es el peor resultado de su historia. En 2016, había ganado la mayoría de los votos en 42 de las provincias, mientras que estas elecciones solo en cuatro.
Unidas Podemos también ha perdido fuerza, desapareciendo por completo del mapa este año, cuando en los anteriores comicios había salido triunfante de cinco circunscripciones, incluyendo Barcelona. Los resultados le atribuyen 35 escaños, lo que le vale una pérdida de diez desde 2016, sin embargo, suma 42 con En Comú Podem, que también ha visto bajar su número de representantes.
Ciudadanos (Cs), al contrario, ha ganado 25 diputados, pasando de 32 a 57 parlamentarios y pasa a ser la tercera fuerza del Congreso.
El partido ultraderechista Vox se impone como el quinto partido en el Parlamento. De no tener ningún diputado, ha pasado a tener 24, un 10,26% de los sufragios y entrando con fuerza en el Congreso.
También se observa que en Vizcaya, Guipúzcoa y Álava, el Partido Nacionalista Vasco ha ganado peso, obteniendo la mayoría de los votos en las tres provincias y ganando un diputado más en el Congreso (6).
Esquerra se ha mantenido vencedor en Lleida y Girona, pero esta vez también ha salido triunfante de Tarragona. El partido independentista ha ganado 6 puestos en el Parlamento, pasando de 9 a 15 escaños.