Human Rights Watch ha denunciado en un informe publicado hoy, jueves, prácticas discriminatorias por parte de los ‘peshmerga’ en el norte de Irak
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Human Rights Watch ha denunciado en un informe publicado hoy, jueves, prácticas discriminatorias por parte de los ‘peshmerga’ en el norte de Irak.
Según esta ONG, las fuerzas kurdas impiden, desde hace meses, a los árabes suníes desplazados por la ofensiva yihadista del grupo Estado Islámico volver a sus casas. Los kurdos tienen libertad de movimientos e incluso se les permite ocupar casas de árabes desplazados.
Un joven árabe explica cómo los ‘peshmerga’ diferencian en los puestos de control entre árabes y kurdos. “Si eres kurdo no hay problema, puedes entrar. Si eres árabe, es un gran problema”, dice Abd al-Rahman Shaker.
Human Rights Wathch dice haber constatado actos discriminatorios en las provincias de Nínive y Erbil, durante diciembre y enero. Y esto es lo que encontraron: desplazados kurdos viviendo en casas propiedad de familias árabes.
“No hay árabes. Ellos huyeron, así que nos quedamos en sus casas”, dice un kurdo.
“Los ‘peshmerga’ me llevaron a una casa árabe y me dijeron que podía quedarme allí”, dice otro kurdo.
La ONG, con sede en Nueva York, afirma que algunas restricciones impuestas a los árabes suníes se suavizaron en enero después de que hablaran con las autoridades kurdas.
“Las fuerzas militares kurdas empezaron recientemente a relajar estas restricciones en algunas zonas bajo su control en el norte de Irak, pero siguen en vigor en muchas otras áreas”, ha declarado Letta Tayler, de Human Rights Watch.
La discriminación y exclusión de la población árabe que denuncia Human Rights Watch, por parte de los ‘peshmerga’, tiene lugar en los denominados territorios disputados, reclamados por las autoridades kurdas y el Gobierno central iraquí.