El ministerio del Interior de Portutal ha abierto una investigación por la agresión de la policía a una familia de seguidores del Benfica el pasado
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El ministerio del Interior de Portutal ha abierto una investigación por la agresión de la policía a una familia de seguidores del Benfica el pasado sábado en Guimaraes. El estadio estaba siendo escenario de altercados debido a las celebraciones de los seguidores visitantes, que acababan de ganar la Liga, y el padre había decidido sacar a sus hijos cuando fue interrogado por el agente que después le agredió.
“Lo que dije, apuntando hacia las gradas, es que debería preocuparse por lo que estaba pasando dentro, porque había mucha gente pasándolo mal. Intentaba explicarle que tenían que solucionarlo, y creo que fueron esos gestos los que originaron lo ocurrido después”, explica José Magalhaes.
Según el padre, abandonaron el estadio antes que el resto de aficionados porque su hijo no se encontraba bien y temía por su seguridad ante las celebraciones de los aficionados del Benfica, que provocaron daños en el estadio.
“La única cosa que mi hijo pequeño me ha dicho en casa es que si él no hubiese tenido sed, no habríamos tenido ningún problema. Para él, ese fue el motivo, se siente culpable porque tuvimos que salir y pedir agua”, continúa el padre.
Compañeros del policía, que ya ha sido identificado, aseguran por su parte que el padre insultó al agente antes de que los hechos tuviesen lugar.