No obstante muchas personas no pueden esperar. Las hay incluso que han pagado unos 50 euros para ver los ensayos que se han llevado a cabo este
No obstante muchas personas no pueden esperar. Las hay incluso que han pagado unos 50 euros para ver los ensayos que se han llevado a cabo este sábado. La entrada para la gala cuesta 220 euros.
El Wiener Stadthalle de Viena verá la lucha por convertirse en el sucesor de Conchita, la cantante barbuda que salió victoriosa en 2014.
La representante húngara explica que es muy importante que la canción tenga un mensaje. “Creo que esa es la esencia del arte, estoy muy orgullosa de representar a mi país con esta canción, porque me diferencia de muchos otros cantantes”. El de Azerbaiyán explica que el mensaje de su canción es “no te rindas” sea cual sea tu situación en la vida. “Hay muchas cualidades en ti y debes luchar por un futuro mejor, por tu alegría”.
El espectáculo no se celebra solo en el estadio. En las últimas semanas se han llevado a cabo varios eventos para los amantes de Eurovisión en el centro de Viena. Uno de ellos han sido un concurso de parecidos con la propia cantante Conchita.
“Es tan divertido… es una de las únicas oportunidades de juntarse con gente de toda Europa y de Australia este año, para celebrar la música… me encanta cuando todos los países cantan en su propia lengua, es muy bonito”, decía una turista británica.
España participa con la canción “Amanecer” de la cantante Edurne.