Enésimo escándalo en el mundo del deporte. Esta vez le ha tocado a la más antigua de las prácticas deportivas, el atletismo. El que ha sido durante
PUBLICIDADEnésimo escándalo en el mundo del deporte.
Esta vez le ha tocado a la más antigua de las prácticas deportivas, el atletismo. El que ha sido durante los últimos quince años presidente de la Federación Internacional ha sido procesado en Francia por un nuevo caso de corrupción.
Un juez anticorrupción ha imputado a Lamine Diack, que abandonó el cargo en agosto, y a su consejero jurídico, Habib Cissé, por presuntamente haber aceptado dinero de la Federación rusa para ocultar positivos de dopaje.
Este caso de corrupción no solo empaña la principal práctica olímpica. También suma un nuevo escándalo a un mundo, el del deporte, que parece estar ahogado por las irregularidades y las malas prácticas. La Justicia lleva meses demostrando que los máximos dirigentes deportivos han convertido el deporte en un mundo en el que los intereses y el dinero priman por encima de todos los valores que dicen defender.