El Gobierno puede decidir no aplicar el resultado- y no alterar la ratificación del tratado- aunque los analistas coinciden en que, de una u otra manera, deberá tenerlo en cuenta. El ministrod e Exter
El NO ha convencido al 68% por ciento de los votantes en el referéndum consultivo del miércoles. El Gobierno puede decidir no aplicar el resultado- y no alterar la ratificación del tratado- aunque los analistas coinciden en que, de una u otra manera, deberá tenerlo en cuenta.
El proceso de ratificación no puede ser igual ahora, tenemos que ir paso a paso. Debemos abrir un diálogo en el ejecutivo, con el Parlamento, con nuestros socios europeos y también con Ucrania para evaluar cuáles serían las consecuencias de esta decisión
Bert Koenders, Ministro de Exteriores de Holanda:
“ El proceso de ratificación no puede ser igual ahora, tenemos que ir paso a paso. Debemos abrir un diálogo en el ejecutivo, con el Parlamento, con nuestros socios europeos y también con Ucrania para evaluar cuáles serían las consecuencias de esta decisión”, decía anoche el ministro de Exteriores holandés.
Es una victoria para los tres partido euroescépticos- especialmente el de Geert Wilders- que forzaron la consulta a través de una recogida de firmas masiva. Wilders dice en su página de Twitter que este voto negativo marca “el comienzo del fin de la Unión Europea”
It looks like the Dutch people said NO to the European elite and NO to the treaty with the Ukraine. The beginning of the end of the EU.
— Geert Wilders (@geertwilderspvv) 6 de abril de 2016
El referéndum es un termómetro para medir el reconocido europeísmo de los holandeses y de anticipar, quizás, crisis futuras que el proyecto comunitario no parece estar en condiciones de permitirse actualmente.