Mostradores vacíos, ventanillas sin colas y poca actividad en el aeropuerto de Fiumicino de Roma por la huelga de 24 horas que han convocado los sindicatos de los trabajadores de…
Mostradores vacíos, ventanillas sin colas y poca actividad en el aeropuerto de Fiumicino de Roma por la huelga de 24 horas que han convocado los sindicatos de los trabajadores de Alitalia.
Un paro que empezó en la medianoche del martes y que ha provocado la cancelación del 60% de los vuelos de la aerolínea italiana, en total 335, tanto nacionales como internacionales.
“Los trabajadores tienen que recibir lo que les corresponde pero por otro lado es bastante duro cuando interrumpen los viajes. Hacen mucho daño a la economía”, decía un viajero.
La razón de la enésima huelga es el llamado plan de relanzamiento anunciado hace unas semanas y que en realidad es de pura supervivencia. Un proyecto que prevé 2000 despidos, una reducción del 30% de los salarios de los pilotos y pretende dejar en tierra unos 20 aviones de corto y medio radio, además de abandonar algunas líneas interiores.
“Etihad no ha cumplido su promesa de invertir en vuelos de larga distancia. Han gastado en uniformes y en cambiar el sistema para implantar su sistema operativo que es mucho más caro. Y como siempre, somos los trabajadores los que pagamos por esta mala gestión”, decía una de las manifestantes.
Los propietarios de la empresa han dicho que no pondrán más recursos para salvarla si no se alcanza un acuerdo con los sindicatos.