“Policías en peligro, población bajo amenaza” o “somos demasiado jóvenes para ser viudas” son algunos de los eslóganes que han entonado en las calles de París unas doscientas esposas de policías y gen
PUBLICIDAD“Policías en peligro, población bajo amenaza” o “somos demasiado jóvenes para ser viudas” son algunos de los eslóganes que han entonado en las calles de París unas doscientas esposas de policías y gendarmes tras la muerte el pasado jueves de un agente en un atentado en los Campos Elíseos.
Algunos policías encargados de velar por la seguridad de las manifestantes no han podido contener las lágrimas. Y es que el colectivo policial lleva años reclamando la atención de los poderes públicos en Francia. Con frecuencia, sus efectivos son blanco de ataques brutales por parte de delincuentes, manifestantes o jóvenes pandilleros. Tampoco se escapan de las críticas de la opinión pública ante la brutalidad de algunas de sus intervenciones.
En todo caso, la víspera de las elecciones presidenciales, el colectivo de las esposas de policías y gendarmes ha recordado al país la angustia en la que transcurren sus vidas y la sobrecarga de trabajo que soportan los agentes desde que se decretó el estado de emergencia en enero del año pasado.