Wimbledon, siempre Wimbledon, una cita obligada al inicio del verano con las mejores raquetas del tenis.
Mucho tenis y muchas más cosas. “Tiempo británico, fresas con nata en una copa de Pimm’s. Toda una tradición. Dos semanas al año que uno no se puede perder”, explica Liam. “Es tremendo. Algo que hemos estado viendo desde niños. Impresionante”, añade Ferdie.
Una cita a la que no ha faltado la Duquesa de Cambridge, por primera vez madrina del club organizador, un honor cedido por la reina Isabel II.
The Duchess arrives at
Wimbledon</a> and meets current and former players on the Players' Lawn <a href="https://twitter.com/hashtag/Wimbledon?src=hash">#Wimbledon</a> <a href="https://t.co/6oVofiYpPw">pic.twitter.com/6oVofiYpPw</a></p>— Kensington Palace (
KensingtonRoyal) 3 juillet 2017
Tampoco han faltado leyendas, como Martina Navratilova, nueve veces campeona en Wimbledon, y exjugadoras como la belga Kim Clijsters. Otro incondicional es el croata Goran Ivanisevic, ganador de este torneo en 2001: “Me gusta ver a quienes son los que juegan el mejor tenis hasta el final, no importan los nombres”, ha dicho Ivanisevic.
Y entre tantas figuras mucho público en el torneo de tenis más antiguo del mundo.
Con Reuters