Lula, ante el juez, dice ser víctima de una "caza de brujas"

Lula da Silva se ha defendido con uñas y dientes durante más de dos horas de declaración ante el juez Sergio Moro, que ya le condenó en otro caso de corrupción a casi diez años de prisión.
El expresidente brasileño se considera víctima de una “caza de brujas”. No solo ha negado todas las acusaciones sino que también ha descalificado a todos los testigos en su contra, en especial, a su exministro de Hacienda, Antonio Palocci, quien la semana pasada aseguró que Lula había hecho un “pacto de sangre” con la constructora Odebrecht para recibir millonarios sobornos a cambio de contratos públicos con la petrolera Petrobras.
Cerca de 5000 manifestantes, partidarios y detractores, esperaban a Lula a su salida del tribunal en la ciudad de Curitiba. A pesar de los seis casos abiertos en su contra, el carismático líder encabeza todas las encuestas de intención de voto para las elecciones presidenciales de 2018.