Un nuevo ejercicio militar conjunto al norte de Belgrado entre tropas serbias y tropas estadounidenses estacionadas en Alemania muestra el acercamiento del país balcánico a la OTAN
Un nuevo ejercicio militar conjunto al norte de Belgrado entre tropas serbias y tropas estadounidenses estacionadas en Alemania muestra el acercamiento del país balcánico a la OTAN. En este caso, se trataba de paracaidistas de élite de ambos ejércitos: sesenta soldados por banda. La conexión eslava con Rusia se mantiene, pero se incrementan cada vez más los ejercicios con las tropas occidentales. Desde 2015, Serbia es un socio directo de la OTAN. En las maniobras, estuvo presente el presidente desde mayo pasado Aleksandar Vucic quien eso sí quiere guardar las formas.
“Serbia está negociando su entrada en la Unión Europea, pero Serbia preserva su posición de neutralidad militar”, precisó a Euronews Vucic.
De todos modos, Vucic apuesta decididamente por Europa y por estrechar relaciones con Estados Unidos sin poner en peligro sus relaciones con Rusia.
“Dieciocho años después de la guerra de Kosovo, el interés estratégico de Serbia parece estar cambiando pese a que el presidente afirme que aun no es el momento”, explica el enviado especial de Euronews, Sergio Cantone.
Las relaciones con Washington se han ido normalizando desde hace tiempo y la diplomacia estadounidense encuentra ahora menos resistencia entre una población que aun recuerda los bombardeos de la OTAN sobre Belgrado y contra el régimen de Milosevic.
“Pienso que Serbia es un país muy influyente para la estabilidad en la región”, considera el embajador estadounidense, Kyle Scottt. “Juega un papel fundamental. Necesitamos continuar trabajando juntos y superar las dificultades del pasado”.
El gobierno serbio, sin embargo, todavía no ha reconocido a Kosovo como país independiente como tampoco lo ha hecho Rusia, China o algunos Estados de la Unión Europea. Aunque Vucic también parece más proclive a un entendimiento: “Desde el bando de Pristina, afortunadamente van a cumplir con sus obligaciones. Al menos, van a poner en práctica lo que firmaron hace cuatro años y medio en Bruselas, en abril de 2013”.
De hecho, el gobierno estadounidense se erige en un actor para limar las asperezas entre Belgrado y Pristina. Necesario para que algún día Serbia entre en la Unión Europea.