La resolución 2397 de la ONU endurece severamente las medidas ya en vigor
Pyongyang ha hecho público un comunicado criticando las medidas punitivas, calificando de "histéricas" las advertencias de Estados Unidos, y de "acto de guerra", las nuevas sanciones.
El régimen liderado por Kim Jong-un también ha advertido que "continuará consolidando sus capacidades nucleares de disuasión y autodefensa."
El pasado viernes, el Consejo de Seguridad de la ONU limitó aún más el acceso de Corea del Norte al petróleo, vetó sus exportaciones en varios sectores y forzó el regreso al país a ciudadanos que trabajan fuera.
Washington fue el gran impulsor de las nuevas sanciones y obtuvo el respaldo unánime de los otros catorce miembros del Consejo de Seguridad, incluidos China y Rusia.
La respuesta de la ONU se produce después de que Corea del Norte lanzase a finales de noviembre un misil balístico de largo alcance, un tipo de proyectil que sería capaz de golpear cualquier punto del territorio continental de Estados Unidos.