Miles de feligreses se bañaban este jueves en aguas gélidas para hacer honor, a su manera, al bautismo de Jesús
La celebración de la Epifanía en Rusia ha tenido lugar este año con ayuda de policías y servicios de emergencia preparados para evitar cualquier percance. Miles de feligreses se bañaban este jueves en aguas gélidas para hacer honor, a su manera, al bautismo de Jesús por Juan Bautista en el río Jordán.
En pilas bautismales abiertas en el hielo, miles de personas se sumergen tres veces para hacer honor así a la Sagrada Trinidad, y limpiarse simbólicamente de sus pecados para el año entrante. Los baños tienen lugar sobre la media noche después de las liturgias. Solo en Moscú, este año, cerca de 200.000 personas han acudido a las pilas bautismales, rodeadas de más de 2500 policías voluntarios y equipos de seguridad que aconsejaban y ayudaban a los bañistas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, acudió también a celebrar el evento en el Monasterio de San Nilo Stolobenski.