Guta Oriental está a punto de caer en manos de las fuerzas del Gobierno sirio. El grupo Ejército del Islam ha aceptado la evacuación de sus combatientes y familias del enclave en un acuerdo con Rusia.
El último enclave rebelde en Guta Oriental está a punto de ser conquistado por las fuerzas del Gobierno sirio. El grupo Ejército del Islam, que aún resistía en la ciudad de Duma, ha aceptado también su rendición y evacuación en un acuerdo con Rusia. Los combatientes podrán dejar la localidad junto con sus familias y los civiles que lo deseen para ser trasladados a la Yarablus, en la provincia de Alepo, en el norte de Siria, una zona que sigue bajo control rebelde.
Cinco semanas de bombardeos incesantes de las fuerzas sirias sobre Guta Oriental han aniquilado a la resistencia. Uno tras otro, los diferentes grupos han aceptado abandonar este territorio, que tenía un enorme valor simbólico para los rebeldes por su cercanía con Damasco. Más de 45.000 personas han salido en los últimos 10 días el enclave, controlado ya al 95 % por las fuerzas del régimen de Bashar al-Asad.