El Gobierno ha decidido acabar con este proyecto que se lanzó en enero del año pasado y que acaparó la atención mundial.
Al parecer no se han obtenido los resultados esperados, así que los 2.000 beneficiarios de esta ayuda dejarán de percibir el dinero al finalizar el año.
El experimento quería comprobar si dotar a ciudadanos desempleados de entre 25 y 58 años con una cantidad fija mensual les ayudaba a encontrar trabajo más rápido y les aliviaba la ansiedad de estar en paro.
Los expertos aseguran que aún es pronto para evaluar los resultados, pero el Gobierno no ha querido extender el periodo de prueba.
Otros países como Kenia, Holanda o Canadá, también están probando este tipo de sistema, aunque con regulaciones diferentes a las que había establecido Finlandia.