El presidente estadounidense ha ordenado una investigación similar a la que provocó después la imposición de aranceles al acero y al aluminio.
Los aranceles podrían ser del 25% a los vehículos importados y también a sus piezas. El presidente estadounidense ha ordenado una investigación para evaluar la situación de la industria del automóvil de su país y la amenaza que supone para ella la importación de vehículos, principalmente de México, Canadá, Japón y Alemania.
Trump se comprometió a proteger la industria del motor durante su campaña y gracias a ello obtuvo la victoria en Michigan, donde se concentra la producción nacional de vehículos.
Poco antes del anuncio enviaba un mensaje por su canal favorito a los trabajadores estadounidenses diciéndoles que "después de muchos años perdiendo sus empleos ya habían esperado bastante".
Esta nueva medida podría afectar a la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que Estados Unidos negocia con México y Canadá.
Trump también ordenó una investigación similar antes de imponer aranceles a la importación de acero y aluminio.