La situación económica de Irán podría empeorar considerablemente cuando se hagan efectivas las sanciones, a partir de agosto.
Después de las protestas masivas de los últimos días en Teherán, el presidente iraní, Hasan Rohaní, ha dicho este jueves en un discurso televisado que el país no cederá ante la presión económica de Estados Unidos:
"Como siempre, Estados Unidos quiere acabar con el poder, con la gloria de la República Islámica de Irán y con la grandeza del sistema y la nación con un nuevo método ", dijo.
Las protestas comenzaron en la capital el domingo. Los vendedores del Gran Bazar cerraron sus tiendas para expresar su malestar por la devaluación de la moneda local, el rial, y la subida de los precios.
Desde que Estados Unidos abandonó el acuerdo nuclear iraní, el 8 de mayo, el rial ha perdido más del 40% de su valor. Y muchos creen que la crisis se agravará en los próximos meses, cuando se hagan efectivas las sanciones estadounidenses.
Las sanciones
En agosto, Washington volverá a poner límites a la capacidad de Irán de comprar dólares, así como al comercio mundial de oro, carbón, acero, divisas y deuda iraní.
Más adelante, también serán objeto de sanción, entre otras, las exportaciones de petróleo y energía.
Además, Washington ha amenazado con sancionar a los países que importen petróleo iraní a partir de noviembre.
Si la situación económica de Irán continúa deteriorándose, los movimientos de protesta podrían aumentar en los próximos meses.