El manifestante europeísta más famoso de Westminster lucha cada día desde hace 15 meses por una vuelta atrás que impida el Brexit
Cada día desde hace 15 meses Steve Brey se aposta a las puertas del Parlamento británico para gritar que pare el Brexit.
De diez de la mañana a seis de la tarde su misión es clara: llamar la atención de los parlamentarios y de los medios de comunicación, incluso saltando vallas y metiendo sus largas pancartas en los sets de televisión.
Europeo convencido, el galés quiere que se ecuche al pueblo y dejar claro que todavía hay vuelta atrás. "Quiero que la gente piense y que vea que ahí fuera no todos estamos alineados. Quiero que en sus pueblos y aldeas vean que la gente está haciendo frente a este lío en el que estamos. No tenemos que irnos, Podemos detener el Brexit", asegura Brey.
A veces le toca defender su causa frente a los euroescépticos que también se manifiestan frente a Westminster y se acercan a discutir con él. Otras, le ayudan a cuidarse la voz para seguir con su protesta.