La Administración Trump corta el grifo de las ayudas a los palestinos
La Agencia estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID en sus siglas en inglés) ha cerrado el grifo de las ayudas en los territorios palestinos. Consecuencia directa de ATCA, la llamada Ley de Clarificación Antiterrorista, esta decisión deja en una situación aún más precaria a muchos pueblos palestinos:
"Este proyecto ha acabado afectándonos de una manera muy negativa. Al principio éramos muy optimistas, pero ahora nos sentimos muy deprimidos. Los estudiantes ya no tienen un lugar donde estar, deben ir a otra escuela, a siete kilómetros de distancia... y la carretera está cerrada por la ocupación, por lo que los estudiantes deben recorrer a pie esos siete kilómetros para llegar a la escuela", explica Theiab Mshahlah, presidente del Consejo de Aldea de Jaba.
La ATCA permite a Washington llevar ante sus tribunales a receptores de ayuda que sean cómplices en "actos de guerra". La Autoridad Palestina niega complicidad con el terrorismo, pero rechazó recibir más asistencia porque teme que la justicia estadounidense se haga eco de las denuncias israelíes. En 2017, la ayuda de USAID en Gaza y Cisjordania superó los 260 millones de dólares. Sin embargo, la Administración Trump las ha ido recortando en distintos frentes.