Apostasía en grupo en Ecuador.
Más problemas para la Iglesia Católica en América.
Docenas de ecuatorianos llamaron a las puertas del obispado de Quito para pedir formalmente su salida de la Iglesia.
Se trata de ecuatoriamos que piden a todos aquellos que han sido bautizados pero rechazan la conducta institucional y la respuesta dada en Ecuador a los casos de pedofilia.
Muchos de los ecuatorianos que renuncian todavía siguen siendo creyentes, pero hacen una distinción entre su fe personal y la institución de la Iglesia Católica.
Los ciudadanos que renunciaron a la Iglesia en el conservador país católico dijeron haber quedado impactados por denuncias de abuso sexual infantil y sobre todo la política de encubrimiento y desprecio a las víctimas.
La apostasía en la Iglesia Católica Romana se define como "el repudio total y permanente de la fe" y es considerada como una falta muy grave, "pecado mortal", junto a la blasfemia y la herejía según la terminología de la doctrina católica.