Testimonio desde Wuhan | Euronews habla con Pedro Morilla, entrenador deportivo del Wuhan Shangwen, equipo de fútbol de la ciudad donde se originó todo.
PUBLICIDAD“Estamos contando los días para irnos”. Al otro lado de la pantalla se encuentra Pedro Morilla, director deportivo del Wuhan Shangwen Three Towns. Tanto él como otros ocho de sus compañeros de equipo se encuentran en el foco del coronavirus que, por el momento, ha dejado 106 muertos en el país. Lo último que se sabe es que se han registrado 4.515 casos en China y hay otros 65 casos en 14 países.
Apenas ha pasado una semana desde que las autoridades chinas pusieron Wuhan en cuarentena y las imágenes que llegan desde la ‘zona cero’ del coronavirus son desoladoras. El día a día en la ciudad fantasma ha hecho mella en el equipo.
Atrapados quedan nueve entrenadores españoles. Uno de ellos acompañado de su mujer y sus dos hijas, la más pequeña tan solo tiene tres meses. “Queremos salir de aquí lo antes posible, si es mañana, mejor que pasado mañana”, afirma Morilla.
“Las horas parecen días”
“Aquí las horas parecen días, tenemos que distraer la mente y pensar en otras cosas”, relata el director deportivo. “Estamos todos en el mismo residencial y quedamos para comer, para hablar… Si no sería todo muy pesado. El fin de semana estuvimos viendo el fútbol para distraer la mente y no estar pensando constantemente en lo que está pasando”.
Tanto él, como el resto del equipo, siguen al pie de la letra las indicaciones que ha dado el Gobierno chino. “Desde que el segundo día nos comunicaron que una de las normas básicas era permanecer en casa, lo estamos respetando al cien por cien. Lo bueno es que vivimos en una residencia privada con seguridad y el recinto es bastante amplio. Tenemos espacio para salir, incluso para hacer ejercicio físico y volver a casa.”, cuenta Morilla.
La última vez que salió del recinto fue el segundo día de encierro. Tuvo que ir al supermercado para comprar provisiones y lo mismo hicieron sus compañeros de equipo con la intención de salir lo menos posible al exterior.
“Nosotros queremos ser repatriados. Nos han informado de que nuestra actividad, que es el fútbol, va a quedar postergada. Si nos dicen que en ocho o diez días tenemos que volver al trabajo aceptaríamos la situación porque no nos queda otra, perosin tener que trabajar en dos o tres meses ahora mismo aquí pintamos poco”, explica el director deportivo. “Tenemos que mirar por nuestra salud e irnos a España, ya cuando las condiciones sean propicias volveremos”, añade.
Desde Madrid se abre una vía de escape para Morillo y sus compañeros. El Gobierno anunció este mismo lunes que está trabajando en la repatriación de los españoles atrapados en Wuhan. Lo hacía la propia ministra de Exteriores en su cuenta de Twitter asegurando que el Ministerio de Asuntos Exteriores y el de Sanidad están trabajando conjuntamente, coordinándose con la Unión Europea y Cooperación para que puedan volver a casa.
“Nosotros no hemos recibido ningún mensaje personal por parte de la embajada. Recibimos la información a través de Edu, nuestro compañero que tiene a su mujer y a sus hijas aquí. Él se puso en contacto con la embajada nada más supo que ponían la ciudad en cuarentena. También recibimos información desde Barcelona”, señala Morillo.
“Estamos esperando el cómo, cuándo y dónde. Esperándolo cada vez con más ansia porque al final se hacen largas las horas aquí y, en España, la familia lo está pasando peor que nosotros”.