Las superestrellas del judo iluminan el Grand Slam de París

Los aficionados al judo se reunieron en París para presenciar el primer día de uno de los eventos más esperados del Circuito Internacional de Judo, el Grand Slam de París 2020.
Los vítores del público se escucharon el todo el estadio cuando la judoca local y cuatro veces campeona del mundo Clarisse Agbegnenou se hizo con su sexto Grand Slam de París para coronarse legítimamente como nuestra mujer del día.
En la final se enfrentó a la japonesa Nami Nabekura, la mujer que la derrotó en el Masters del año pasado. Sin embargo Agbegnenou no estaba dispuesta a perder en casa. Un gran contraataque a 13 segundos del fínal selló la victoria para alegría de los asistentes.
"Ha sido una locura" declaró la francesa, "cuando entré y escuché mi nombre, la energía... Estaba de buen humor y me dije "guau", todas estas personas están animándome. El público ha estado realmente increíble. Muchas gracias, estoy muy feliz, No podía imaginarme que alguien como yo pudiera tener a toda esta gente siguiéndome. Por su puesto había otros franceses pero quiero darles las gracias porque he sido invencible gracias a ellos".
Nuestro hombre del día fue el japonés Ryuju Nagayama, que siguió demostrando su dominio en la categoría de -60 kilos con una actuación de medalla de oro. Después de escapar por poco del ataque de su oponente ruso, Yago Abuladze, Nagayama demostró su clase puntuando dos waza ari para hacerse con la victoria. Primero con un seoi nage tremendo y despúes con un ura nage único.
"Para ser sincero me sorprendió verme en el suelo al principio del combate" afirmó el japonés, "pero después de escapar me recompuse a mi mismo y practiqué mi técnica".
En la categoría femenina de -48 kilos, la victoria fue para la ucraniana y número uno del mundo, Daria Bilodid. Un waza ari en la mitad del combate fue suficiente para superar a su oponente japonesa, Wakana Koga, y hacerse con su segundo Grand Slam de París.
Su Alteza Imperial la princesa Tomohito de Mikasa, embajadora de la Federación Internacional de Judo, le colgó la medalla.
En la categoría de -52 kilos, la kosovar Distria Krasniqi se colgó el oro con un waza ari frente a la italiana Odette Giuffrida.
Francesco Ricci Bitti,Presidente de la Asociación de Federaciones Internacionales Olímpicas de Verano, le entregó la medalla.
La campeona del mundo Christa Deguchi también mostró su dominio sobre el resto de las competidoras en la categoría de -57 kilos. Después de un día cómodo para la canadiense se encontró con la final con Sumiya Dorjsuren a la que derrotó con un waza ari.
Le entregó la medalla Gergely Gulyás, representante de la oficina del Primer ministro de Hungría.
Soichi Hashimoto le dio el segundo oro de la jornada a Japón al imponerse sobre el kazajo Zhansay Smagulov en la final de -73 kilos.
Y nuestro movimiento del día vino del uzbeco Khikmatillokht Turaev, que necesitó simplemente 7 segundos para despachar a su rival por la medalla de bronce en la categoría de -73 kilos con esta brillante combinación.