Después del parto se tienen que tomar medidas estrictas, aunque esto no sea fácil para las madres.
PUBLICIDADFue justo antes del comienzo de la cuarentena. La pareja tuvo la suerte de poder estar juntos durante el nacimiento de su hijo... Ante el avance de la pandemia, esto se ha convertido en una excepción.
En medio de la crisis, los servicios de maternidad se enfrentan a muchas dificultades. Esta cuidadora de niños, que trabaja en un hospital de la región de París, ha preferido mantener su anonimato.
Pero ha podido contar a Euronewscómo se tratan los casos de coronavirus entre las mujeres embarazadas que están a punto de dar a luz. Después del parto se tienen que tomar medidas estrictas, aunque esto no sea fácil para las madres.
"Desde el momento en que tenemos una sospecha sobre una madre, le hacemos una prueba y como medida de precaución, la separamos del resto. Esto dura por lo menos 3 días para estar seguros de que hemos hecho todas las pruebas, y puede llegar hasta 14 días si la madre da positivo. Tratamos de mantenerlas informadas enviando fotos y explicándoles lo que pasa. Es difícil porque separarse de su hijo después de su nacimiento no es lo deseado".
Cada vez más hospitales prohíben a los padres asistir a los partos. Este no es el caso en el centro en el que trabaja esta profesional de la salud. Pero explica que después de los partos, las precauciones prevalecen.
"Después del nacimiento del niño, todas las visitas están prohibidas, por lo que el padre no puede ver a su mujer y a su hijo."
Afortunadamente, la mayoría de las mujeres embarazadas en el centro no han dado positivo. Pero esta situación ejerce una presión adicional sobre el personal sanitario. Le preguntamos si han contado con suficientes máscaras para todo el personal.
"Al principio no teníamos suficiente equipo médico. Tomamos nuestras precauciones como de costumbre hasta que se nos pidió que usáramos máscaras de forma continua, pero no había suficientes"
Ahora mismo, disponen de más equipo médico y se han aplicado medidas estrictas para reducir el riesgo de propagación dentro de la unidad de maternidad.
Marine Muscat Orbach, es comadrona en un hospital de París: "Todos los pacientes que llegan con síntomas o que tienen coronavirus entran por una puerta distinta, tienen su propio espacio aislado del resto y se limitan el número de visitas. Así que implementamos la teleconsulta para los pacientes que no están teniendo ninguna complicación importante durante su embarazo".
Aún no es fácil evaluar con precisión cuáles podrían ser los riesgos de una transmisión entre madre e hijo durante el embarazo, pero la muerte de un niño de 6 meses en los Estados Unidos, aunque sea una anomalía, exige tomar más precauciones.