"La pandemia terminará, pero el teletrabajo llegó para quedarse"
La pandemia de la COVID-19 ha obligado a muchas empresas y trabajadores a zambullirse sin apenas tiempo de preparación en las procelosas aguas del teletrabajo. En pocas semanas han tenido que ajustar, a veces brutalmente, sus flujos de trabajo, su tecnología e incluso los servicios que ofrecen a una nueva realidad que no está exenta de peligros:
"En una época en que la información es el nuevo oro de las empresas, el espionaje de los datos corporativos es el principal objetivo de usuarios malintencionados, que llamamos hackers. Los principales peligros para los datos corporativos son su intercepción, su alteración o simplemente su destrucción", explica Giorgos Balafoutis, arquitecto cibernético de Microsoft:
Los riesgos se multiplican cuando se trabaja con ordenadores personales o se conectan a la red de la empresa:
"Es muy importante tener un software actualizado, especialmente el sistema operativo. Además, las aplicaciones que utilice deben estar actualizadas para que sean aprobadas por su empresa. Así como el antivirus, tiene que estar al día", sentencia Balafoutis.
Hay quien considera que los cambios provocados por la Covid-19 en muchos campos han llegado para quedarse, y este es probablemente el caso del teletrabajo.
"El modelo de trabajo cambiará definitivamente. La actual pandemia terminará en algún momento, pero las empresas pasarán a tener en cuenta los riesgos de los eventos de cisne negro, tan inesperados que ni siquiera se los plantearon como escenarios posibles. Las compañías buscarán ser mucho más flexibles para que sus usuarios o empleados puedan trabajar, buscarán hacer un modelo laboral flexible para que puedan trabajar desde la oficina o desde casa".
Pero tan importante como el durante será el después. Giorgos Balafoutis advierte de los peligros que afrontarán muchas empresas al bajar la guardia cibernética cuando concluya la pandemia.