El confinamiento durante la pandemia nos ha dejado muy necesitados de abrazos, de cercanía y de calor humano. Aunque sea entre plásticos... ¡qué ganas tengo de abrazarte, mamá!
Una familia de Ontario, en Canadá, se dijo: ¡Basta ya de distancia social! Y han diseñado una escafandra para darse abrazos en el jardín.
Carolyn Ellis y su esposo Andrew idearon esta escafandra en vísperas del Día de la Madre.
**Una cuerda de tender, cinta adhesiva y una sábana de plástico... La idea resultó en un abrazo fundiéndose de manera segura, sin temor al virus...
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